Las noticias viajan a través de las ratas. Son chillidos
resistentes, aullidos agudos y voraces.
Escucho las irrealidades, respiro hondo.
Cada vez estoy menos solo, en compañía agradable y lejana;
arropado con palabras sueltas cargadas de ánimo.
Las noticias son las que no resuenan.
Las ratas se asoman por debajo de la puerta, hacen túneles
bajo los muros de latón. Gritan y echan espuma por la boca.
No son avisos, son falsedades ciertas, bolas de residuos
fósiles; falacias.
Otro día más pasando el umbral de la tarde, apartado de la
lujuria, arrinconado en el pequeño redil del infierno. Sentado en mitad de la
oscuridad, vacío, buscando una vela...
Cosas de internet y círculos comunes que me han traído a tu casa y por aquí me quedo. Me gusta lo que leo. Estas ratas me ha parecido sentirlas muy muy cerca. Felicidades por el relato me quedo por aquí
ResponderEliminarIinvitado quedas a mi blog:
http://montesinadas.blogspot.com.es/
Y quédate por allí si algo te emociona.
Abrazos, te sigo.